"Auch, la negra me mando sms para salir" - le digo a Lili - "Cero ganas hoy, menos de cacería".
"A mí me pasaría lo mismo" - contesta.
Recordé entonces la reunión hace un par de semanas de algunas de las "chicas" (incluídas la Negra y Liliana) que fuimos a los Esteros del Iberá hace un par de meses.
La charla esa noche tuvo un tema excluyente en cualquier reunión de mujeres.
Después de un rato de escuchar al resto (soy mas bien callada), me sorprendió el que todas sigan, a pesar de que el medio siglo casi alcance a la mayoría, esperando un hombre con quien compartir su vida.
Todas excepto yo.
Volví una vez más a preguntarme el por qué esa situación fue siempre inimaginable en mi vida.. bueno, quizás sí, un par de veces lo pensé, en esas épocas de juventud, o no tanto.
Calculo que, para quienes vivimos y disfrutamos la soledad, puede ser algo normal.
Quizás por eso me gusta tanto la luna...
Fotito de la luna de mi autoría tomada con mi Canon T3i montada a un telescopio
